martes, 22 de noviembre de 2016

Física y Artística, materias malditas


- Dan al traste con el promedio de buenos alumnos.     

Se está tardando la Secretaría de Educación Pública en desaparecer o al menos sacar del cuadro de asignaturas obligatorias, las materias de Educación Artística, Educación Física y Talleres, principalmente en Secundaria, debido a que éstas dan al traste con el promedio de buenos estudiantes que pudieran ser excelentes físicos-matemáticos, biólogos, arquitectos o vaya a Usted a saber, pero que no saben tocar una flauta o no pueden correr al ritmo de los demás, por lo que ven reducidas sus posibilidades de alcanzar una beca o ingresar a una institución de prestigio.

Este es el constante reto al que se enfrentan los alumnos, que cargados de tareas de materias que le son de mayor utilidad en la vida, como Matemáticas, Español, Biología, Física, Química, entre otras, tienen que lidiar también con el encargo de maestros que les exigen aprender a interpretar una melodía en su flauta dulce y por muy buenas que sean sus calificaciones en las otras materias, si su vocación no es la música y es más, si se pretende que sean músicos a fuerzas, ya estuvo que no lograrán una buena calificación y eso le afectará su promedio general, que cuenta mucho para sus aspiraciones educativas superiores.

Desde hace años se ha dicho que la educación secundaria es el cuello de botella en la formación de buenos ciudadanos y profesionistas, en parte porque los alumnos llegan muy mal de la primaria, pero también porque se encuentran en los inicios de la adolescencia, una etapa difícil en la que los jóvenes enfrentan muchos cambios físicos y mentales, que inciden en su comportamiento, el cual, si no cuenta con buenas bases para su desarrollo integral, puede afectarles seriamente.

También actualmente ya se discute la posibilidad de desaparecer las tareas y que en su lugar se asignen actividades complementarias fuera del horario escolar, que el alumno pueda encontrar cerca del lugar donde vive, entre las que pueden mencionar, ahora sí, la activación física, algún taller de arte como música, pintura, dibujo, diseño, entre otros o bien de cómputo, idioma, plomería, carpintería, electricidad, que son de utilidad en la vida diaria.

Así pues, urge que la Sep se ponga las pilas y deje de cortar el sueño de muchos jóvenes, que en ocasiones viven más en la preocupación por no aprenderse las "pisadas" de una canción, que por una ecuación matemática o la fórmula química de determinado elemento. Hoy México y en el caso específico, Baja California Sur, requiere de jóvenes emprendedores y competitivos dentro de lo que el mercado mundial requiere y si bien el arte y la activación física son elementos importantes para fortalecer el espíritu y el cuerpo, no son temas fundamentales en la formación académica.


En pocas palabras, no se debe descuidar lo uno por lo otro, pero es necesario saber jerarquizar lo que en materia de competitividad reclama el mercado global. El arte, como parte del ser interno, surgirá dependiendo de la persona y su circunstancia, al igual que el deporte, pero las materias prioritarias son elementales y se quiera o no, se tiene que luchar por dominarlas, ya que sin ellas los jóvenes de hoy, difícilmente podrán insertarse en el mundo competitivo del mañana.

No es justo que en ocasiones, por caprichos de profesores en disciplinas de educación artística y educación física, se le trunque el futuro a un joven que tiene capacidad para otras ramas, que son las que están definiendo el futuro del mundo.