* Ya no más el "malo por conocido".
"No quiero votar por el Peje, pero...", fue la
expresión que alcancé a recoger fugazmente entre un grupo de señores que
platicaban animadamente en las inmediaciones del mercado Madero y que penetra cada
vez más en el ánimo desencantado de muchos ciudadanos, a los que la vida no ha
querido o ha dejado de sonreirles y que voltean a su alrededor en busca de
respuestas, pero no las encuentran y que tampoco están dispuestos a que se
cumpla la consigna de que "más vale malo por conocido", porque ya están
hartos de eso.
Decía en una entrega anterior, que los gobiernos necesitan
transformarse y olvidarse del marketing oficial, ese que se hace a través de
redes sociales, videos por TV e Internet, spots radiofónicos y las gacetillas o
notas pagadas, que se publican en los periódicos. Se requiere que los
gobiernos, publiciten sí, pero lo que la gente requiere para hacer más llevadera
su peregrinar por oficinas de gobierno y ante situaciones que enfrentan donde
tiene que ver cualquier acto gubernamental.
Discretamente aminoré el pasó, que tampoco crean que es de
marchista de Río 2016, pero bueno, tenía que escuchar más de la plática entre
estos incautos votantes, que se había quedado en ese "pero", que
suele ser común en la cultura mexicana (no sé si sea parte del lenguaje
universal) con el cual se da a entender algo que no se puede explicar, ¿me
explico? La plática entre estas personas, tres o cuatro, no recuerdo bien,
siguió más o menos así:
- No quiero votar por el Peje, pero...
- Pero no queda de otra.
- Pos creo que no...ya ves al Peña Nieto y el desmadre que
trae.
- Y aquí ni se diga con esta pinche matadera...y fueron los
del PAN los que iniciaron todo.
- Y crees que el Peje va a resolver esto...no, si todos son
iguales.
- Pero al menos a ese pinche loco no lo conocemos...igual
sale bueno.
-Mmm...pos ta´ cabrón...está pa´ pensarla.
Y se hizo la larga pausa, esa quemarcamos la mayoría, ante
todo lo que acontece a nuestro alrededor y que no entendemos y peor aún, a lo
que ninguna autoridad da respuesta, ya sea federal, estatal o municipal, porque
al viejo estilo, en campaña siguen prometiendo barbaridad y media y a la hora
que les toca estar al frente de lo que tanto pelearon, no saben ni qué y ni
cómo hacerlo, pero eso sí, te prometen mover a México y un mejor futuro y no sé
cuantas superfluidades más, pero a la hora de la hora demuestran no tener la
capacidad de hacer aquello que prometieron como candidatos.
Deficiencias educativas, de salud, de servicios públicos, de
seguridad y muchos más, son a las que nos enfrentamos los ciudadanos a diario desde
hace años y esos que han gobernado y los que gobiernan, no lo han podido
resolver, por más cuentas alegres que presenten, por eso, la gente, en un
descuido, podría darle la espalda a la tradición del voto autómata del por éste,
éste o éste, pero no más y entonces, cada vez son más los que piensan que si no queda de otra,
le dan su sufragio al que no quieren, ya no por castigo, sino porque tal vez no
esté tan loco como piensan y en esa ruleta rusa, ya es jugársela demasiado...pero
así de grande es la desesperación del pueblo.
