martes, 2 de agosto de 2016

La Paz, Ciudad en Tinieblas

*Y el "Gentleman de la Basura"?

Tengo ocho años viviendo en el mismo lugar de la calle Ramírez, por la 5 de febrero. En ese lapso, el Ayuntamiento de La Paz de Armando Martínez, nunca me había quedado a deber tanto como ahora, en que desde hace aproximadamente seis meses, la luminaria ubicada exactamente frente a mi casa, se encuentra apagada. Antes si acaso duraba fuera de servicio dos o tres días, una semana máximo, porque el personal de Servicios Públicos se aplicaba a tiempo y resolvía el problema. Actualmente como que ya se mancharon demasiado.
Mi caso no es por exponer una situación personal a las autoridades, sino para ejemplificar lo que estamos viviendo muchos ciudadanos de La Paz, debido a que de pronto, nos estamos quedando en tinieblas. Ya de por sí está uno con el dese fruncido por tanta bala y tanto malandro que anda suelto y encima el gobierno municipal les redecora su hábitat para que puedan cometer a sus fechorías. Y tanto que se celebró que el "Gentleman de la Basura" hubiera regresado a Servicios Públicos Municipales, porque decían que el Martín Guluarte sí sabe. Y miren nada más la decepción.
Se habla de que no hay dinero, que todo se lo llevó Esthela Ponce;  también se argumenta el litigio con la empresa a la que la anterior administración le entregó la concesión del alumbrado; que el robo del cableado y nada más falta el pretexto de que las balas que hoy surcan los aires paceños, están rompiendo las luminarias. Pues será el sereno, pero la gente requiere de los mínimos servicios públicos y el del alumbrado es uno de ellos, porque contribuye en gran medida a la seguridad de las personas, principalmente en estos tiempos violentos.
Qué nos queda a la gente ante este problema. Cuando menos, invertirle a unos foquitos extras, si se tiene con qué y dejar la casa como arbolito navideño, para despistar al enemigo, porque parece que la autodefensa es el camino a seguir, ante lo indefensos que nos están dejando las autoridades, que ni atacan a la delincuencia y ni ofrecen condiciones adecuadas del alumbrado público, que tienen la obligación de otorgar.
Esta es una muestra de cómo hay políticos que llegan a un cargo público por obra y gracia de la suerte o del compadrazgo, sin la más mínima idea de lo que tienen qué hacer. Caro pagan los ciudadanos el salir a votar para elegir a sus autoridades, sean del partido que sea. Hoy por lo pronto está bien visto que el PAN no tiene un plan estructurado para gobernar un municipio en Baja California Sur y que van dejando una estela de desilusión, aunque pretendan tapar su ineptitud exponiendo las trapacerías de sus antecesores del PRI.

Ya no tarda en que los ánimos electorales vuelvan a ponerse al rojo vivo y esos que hoy están demostrando su ineptitud, saltarán a la palestra en busca de una nueva posición política. Ojalá que los ciudadanos, esos que no andan de huele pe...sos atrás de los candidatos, buscando asegurar una chamba, decidan darles la espalda y buscar mejores opciones. Sabemos que está en chino encontrar buenos elementos para un cargo público, pero al menos tener la satisfacción de truncarle el paso a esos que llegaron sintiéndose dioses y no son más que pobres diablos.